viernes, 19 de abril de 2013

PICO DE COARGAZAL


Popa Chubby es uno de los guitarristas de blues rock contemporáneos que más me gustan. Neoyorquino, grande y gordo con unas manos enormes, no sé como es capaz de atinar a pisar la cuerda en su sitio. Tiene una sensibilidad punteando que está fuera de lo común, llenando minutos y minutos de dulces melodías combinadas con escalas pentatónicas veloces y unos riffs con un swing majestuoso.
Ha sacado nuevo disco… lleva desde principios de los 90 alegrando la vida de muchas personas, y por eso, aunque no siga este blog, queremos, desde aquí, darle las gracias.
Cuando empecé en esto de la montaña, lo hice a la aventura, con un plano de papel en una mano, la brújula en la otra, y el corazón latiendo con ganas de subir a lo más alto… hoy, enemigo del track de GPS, sólo llevamos el aparato para registrar nuestra huella y conocer la estadística, y como no, tener esa potente herramienta para, en caso de pérdida o desorientación (nunca me he perdido, por ahora) poder replantear la posición correcta en mi plano de papel (el de pantalla sirve para poco) y salir de ahí…


En la sierra de Cádiz, nadie se va a perder, pues es tan pequeñita, que empiezas a caminar para abajo, y llegas a una carretera…
El objetivo era investigar la zona de Coargazal, cerca del famoso Salto del Cabrero (¿será verdad que el “Cabrero” dio un salto tan grande?, O será más bien exageración andaluza…), y para ello, dejamos el coche en el Puerto del Boyar, y subimos hasta el Puerto de las Presillas, donde los buitres, todavía reposaban en algunos picachos de caliza. 


Cruzamos la cancela, por la que se accede a la casa de Dornajo, y vimos una “verea” que bajaba… muy atractiva, así que le hicimos caso, y llegamos hasta el camino del Salto antes mencionado, justo a la altura de la cabreriza de Albarrán. 


Pues continuamos por este popular sendero, hasta que divisamos una trocha, ascendente, y tras consultar el plano, parecía que podría ser por ahí. Está muy desdibujada, pero hay algún hito, y 


muchos más que pusimos nosotros, y hacía unos días habían estado desbrozando por allí, así que conseguimos llegar a las paredes del Coargazal. 


La arista es espectacular, de hecho la recorrimos cuasi entera, buscando un boquete de caliza, especie de túnel, que hace unos 6 años, o 5, me habló de su existencia mi amigo Fali “el Coleta”.


La zona es muy atractiva, y poco transitada, con unas vistas extensas y desde donde se reconocen todos los picos cercanos.



Después de “jalar”, continuamos por el sendero, más marcado en esta vertiente, hasta atravesar un pinar escondido, muy coqueto, salpicado de encinas y de mucho encanto. Este camino serpenteante y rodeado de caliza y de una veintena de picos de entre 1200 y 1300 metros, nos



 lleva a otra vaguada, por donde podemos ir ascendiendo a buscar el camino que viene de la Casa Dornajo y por este último, hasta el lugar donde teníamos aparcado el auto.

MONTAÑA


En el año 2010 comenzamos a elaborar Caminos y Caños, con el objetivo de compartir los deportes que actualmente practicamos, como es la montaña y los deportes náuticos.
Desde siempre hemos sentido una atracción y respeto por la NATURALEZA  considerada como un todo, por eso, nuestro objetivo es crear conciencia ambiental para fomentar el respeto y conservación de nuestro Patrimonio Natural, para poder preservarlo para las generaciones futuras.
Nuestro amor por la montaña nos ha llevado a muchos sitios y lugares como la Garganta de Liechtenstein, y travesía por los lagos Gagersee y Tappenkarsee; el Parque Nacional de Hoe Tauern (Grossglockner-3.797ms) en Austria. Höchkönig y las cataratas Krimmier, en Alemania.
Treking por los Balcanes con el ascenso al pico Vihren – 2.914 ms, en Bulgaria. Camino Inca y el valle del Colca, en Perú.
Trekkin por el desierto del Sahara, con rutas por Erg Chebbi y Erfoud. Expedición a Kenia y Tanzania, pasando por los Parque Nacional de Arusha, Parque Nacional de Tarangire, Lago Natrón, Kilimanjaro, Parque Nacional del Serengeti. Así como, por los Parques Naturales de nuestro país.
A Fran siempre le han apasionado los grandes espacios llegando a escalar cimas como Sierra Carbonera, en San Roque, cuando solo tenía 11 años, lo que despertó en él esta singular e inútil afición. De ahí al Aneto, Monte Perdido, Algás, Argualas, Garmo Negro, Infiernos (occidental, central y oriental), Perdiguero, Posets… en Pirineos, y Aletschorn (4195m), AllalinHorn (4027m), Weismeis (4035m) y Lagginhorn (4010m) en Alpes Suizos…
Por eso éstas páginas sólo recogen nuestras impresiones subjetivas de los sitios que visitamos, y ninguna referencia de la que damos debe ser tomada al pié de la letra, para luego, poderla utilizar como guía en la realización de este tipo de actividades.
No nos hacemos responsables de una mala utilización o interpretación que se pueda dar a estas reseñas, siendo cada persona misma la que deba valorar sus conocimientos técnicos, forma física, así como, la experiencia necesaria para llevarlas a cabo.
























   












miércoles, 17 de abril de 2013

CAÑO DEL RUBIAL


Después de un mes de lluvia, este fin de semana, el tiempo nos ha dado una tregua y  hemos aprovechado para practicar nuestras dos aficiones, el kayak y la montaña. Así que, el viernes salimos a palear por el Caño Zurraque y del Rubial. Comenzamos nuestra singladura en el Caño de Sancti Petri que es un curso de agua de mar, que discurre entre las localidades de San Fernando Chiclana y Puerto Real;  este entramado de caños forma parte del ecosistema del Parque Natural de la Bahía de Cádiz.


Una vez abandonamos este caño nos sumergimos en el río Zurraque y vamos dejando en nuestra margen derecha la  Isla del Vicario para adentrarnos en lo que se configura como el Caño Zurraque. Esto tiene, para nosotros, un nexo de unión con Sevilla, donde surgen los cantes del Zurraque a la vera del río y que también nos canta Manuel Calero en la soleá del Zurraque de Triana.

 
A pesar de que las características de este ecosistema sea un entramado de caños y esteros podemos decir que su morfología está perfectamente elaborada para ordenar lo que desde época neolítica y fenicia se configuraban como las salinas. Así, vemos como el Caño Zurraque por el que vamos discurriendo es un brazo de mar amplio por el que corre agua de mar y va nutriendo a las salinas de agua por medio de unas compuertas de marea edificadas en los bordes del caño, es la que comunica el estero con el caño de alimentación. 


Poco a poco vamos disfrutando de una tarde soleada y tranquila, porque adentrarte por los caños es sinónimo de tranquilidad, expansión, complacencia, aunque, no hay que olvidar que hay que ir remando; nos acercamos al nuevo puente sobre el Caño Zurraque que comenzaron las obras en 2009 y dará paso al Tranvía Metropolitano de la Bahía de Cádiz que unirá Chiclana con San Fernando y Cádiz, tiene una longitud de 24 Kms, una obra colosal que no sabemos cuando terminará y si algún día podremos disfrutar de este recorrido, demasiado coste para los tiempos que corren...


Bueno, seguimos con nuestro recorrido y nada más pasar este puente pasas el puente de hierro construido en 1912 y que vino a sustituir a uno de piedras que hoy día podemos ver sus ruinas en sus márgenes y en la época era conocido, como el punto de Control, pues era una oficina de arbitrios municipales. También era frecuentado por la Guardia Civil para evitar el contrabando de tabaco procedente de Gibraltar. Y éste, a su vez, fue sustituido por el antiguo y originario puente de barcas en 1841, que estaba levantado en madera y se encontraba en muy mal estado. 
                                     
                                              

Este puente fue construido por el Ayuntamiento de Chiclana de la Frontera y era el único medio de unión entre las poblaciones de Cádiz-San Fernando-Puerto Real y Chiclana, en aquella época.  El puente de barcas es una hilera de barcas de madera ancladas al fondo y sujetas entre sí, en este caso eran siete barcas, para mitigar los efectos de las mareas.
Como vemos en menos de cincuenta metros hacemos un recorrido por la historia de este lugar desde el s. XIX y que ha dado origen a la historia de las comunicaciones, pero tristemente todo se ha deteriorado y abandonado como todas las casas salineras que se encuentran a su alrededor y que marcan la idiosincrasia de unos pueblos.
Una vez pasa estos puentes tienes dos opciones seguir por el Caño Zurraque, o bien, coger por un ramal que sale a la derecha que es el Caño Rubial que te lleva al Pinar de los 


Franceses, nos adentramos por él, y pasamos por la casa salinera de Rubial Chico, y 


vemos como este Patrimonio popular que ha definido a una generación de trabajadores, poco a poco y año tras año, se va deteriorando, se va cerrando una historia cultural centenaria y muy arraigada a la Isla.