lunes, 24 de junio de 2013

SOLSTICIO


Un día después, la luna, estaría especialmente grande y brillante, y para los habitantes de zonas costeras, con la cantidad de contaminación lumínica que tenemos sobre nuestras cabezas, es más atractivo disfrutar de ese momento estelar, si nos separamos del mar y ascendemos, aunque sea un poco.
Hace calor para andar por la montaña, pero la noche, es fresca y agradecida con el esfuerzo, además la luna salió pronto, y se despidió del sol mientras nosotros aprovechábamos para inmortalizar esos momentos.
A media noche, se podía caminar por la caliza, sin necesidad de iluminación artificial, y las poblaciones que rodean la montaña, en lontananza, son perfectamente visibles.
El momento del amanecer, es único, y no solo por los anaranjados tonos de levante, si no, que incluso es más espectacular contemplar, de nuevo, el cono de sombra que proyecta sobre poniente, la montaña sobre la que nos encontramos.
Esta ha sido nuestra particular forma de abrir una puerta hacia el verano, recordando a Joe Satriani, con una de las composiciones de su álbum Unstoppable Momentum… los que lo conocen, saben a que tema nos referimos.


















jueves, 13 de junio de 2013

MTB EN PUERTO REAL (Cádiz)


Ya hace mucho que el gran Popa Chubby actuase en la Real Isla de León, pero las notas musicales sacadas de su guitarra y su garganta, todavía viajan a la velocidad del sonido por los alrededores de la Bahía.
Por esos alrededores, hay una extensa red de cañadas, veredas y cordeles, adecentados y deslindados (no todas…) por la Consejería a lo largo de estos últimos años… antes de comenzar la estafa financiera a la que han tenido la desfachatez de llamar crisis y que incluso, algunos, se han atrevido a atribuirla al ciudadano por llevar ¿años? viviendo por encima de sus posibilidades… como si eso fuese posible.
Ya hace mucho que no se actúa en estos corredores verdes, y lo único que se les hace es daño, arrojando muebles, escombros y otros vertidos de fuerte impacto ambiental como coches abandonados, baterías, aceites de motor… la verdad es que no se que piensa la gente.
Si no fuese por esto, la primavera y el invierno, son fechas idóneas para disfrutar, en bicicleta, de este paraje de campiña que abarca desde las salinas, hasta Jerez… desde los esteros, hasta la asidonense Medina… desde el mar, hasta la montaña.
Realmente, solemos salir todo el año, al menos una vez a la semana, por estos parajes, donde disfrutar tan rápido como sean capaces nuestras piernas de dar vueltas al sistema de tracción de nuestra montura.


                                        

martes, 11 de junio de 2013

EL PLACER DEL VIVAC


El vivac como fin, y no como medio, eligiendo debida y premeditadamente el enclave o posición, es una de las experiencias más reconfortantes de cuantas se puedan realizar en el medio natural. Procuramos llevarlo a cabo varias veces al año, y cuasi siempre en la montaña, pues después de haberlo comparado con la experiencia costera, la sensación en altura es mucho más agradable por cuestiones meteorológicas, de aislamiento, de silencio…
Además del placer del sueño en fase R.E.M. condicionado por la percepción de los sonidos que te rodean, que no deja de ser una maravilla, tenemos la oportunidad de observar el cono de sombra que proyecta la montaña sobre la que dormimos, solo unos minutos después del orto.
Unas notas musicales provenientes de las lentas manos del maestro Clapton, podrían ser, seguramente, la guinda de este incomparable pastel.



  

jueves, 6 de junio de 2013

GAITANEJO


Aprovechando nuestra estancia en el Paraje Natural del Desfiladero de los Gaitanes, no quisimos irnos habiendo realizado sólo un itinerario, y nos acercamos al Restaurante El Kiosco, donde hay un túnel, junto a las instalaciones del bar, y si caminas por la carretera, en dirección a Ardales, localizas otro túnel, muy pequeño, pero más largo que el anterior. Entramos por este túnel, y salimos bajando, por la pista, hacia la Central Eléctrica Gaitanejo, situada en un enclave espectacular.
Al llegar a la central, la rodeas por su izquierda, según llegas, y este camino te lleva al más popular de los itinerarios que se pueden practicar en el parque: El Caminito del Rey.
Actualmente, y por motivos de seguridad, pues las instalaciones están muy deficientes, el sendero está clausurado, y si saltas la puerta, que no es difícil ni peligroso, solo puedes recorrer unos 15 metros, pues han desinstalado unos metros de tablero para que no se pueda acometer el recorrido. La única opción que tenemos, es, repechar hacia la derecha, unos metros antes de la puerta, para llegar a un punto de reunión, y rapelar hasta el camino, pero aunque esta práctica es habitual entre los guías locales para meter a los grupos, no es para nada aconsejable.
No queremos arremeter contra la profesión de guía, pero me parece bastante arriesgado, llevar a turistas por este maltrecho camino, cuando las autoridades, por el motivo que sea, lo han cerrado.
El entorno, sobrecoge por su verticalidad y por el gran interés geológico que ofrece. El cañón es sencillamente sublime, pero llegados a este punto, y tras curiosear tras la puerta, nos tuvimos que volver por la pista, y buscamos el carril que asciende hasta el mirador natural El Hoyo que se yergue sobre el desfiladero y se haya en las inmediaciones del pico Convento. Hacía mucho viento y frío, todo lo contrario al día anterior; asomarse por aquellos tajos se tornaba peligroso, pero a su vez, la curiosidad innata en el montañero, te atraía como un imán hacia el filo… desobedeciendo a toda llamada a la sensatez. Como dice un gran amigo: Antes morir, que perder la vida.
Este mirador, es buen lugar para atrincherarse a manducar algo y dar a los oídos el placer de sentir la guitarra de Rory Gallagher, un gran hombre y artista del folk blues, irlandés de pura cepa y con un sentimiento que se puede adjetivar, como las paredes de este cañón, de sublime. Bullfrog Blues sería la canción perfecta para escuchar en esta atalaya natural.
La vuelta la realizamos por el camino que discurre junto a la ribera del coqueto embalse del Gaitanejo, hasta la presa del Conde del Guadalhorce.
Un buen paseíllo para dar por terminado el fin de semana.