Tas
varios meses de sequía, el miércoles de esta semana, la anunciada borrasca
empezó a descargar por toda Andalucía y como han sido muchas las salidas a la
montaña sin que nos sorprendiera la lluvia, decidimos ir a mojarnos a la Sierra
del Endrinal.
Pero,
nunca llueve a gusto de tod@s, y sino que se lo digan a las personas que en
Málaga o Murcia han visto como el agua arrancaba parte de sus vidas o su propia vida, en algunos
casos, y lo peor de todo esto es que estas desgracias hayan ocurrido por haber
modificado el curso del agua con ayuda de construcciones que se suponen que
están supervisadas por expertos en la materia.
¿Cuántas veces nos hemos sorprendido viendo
por la tele como en otros países el agua se lo llevaba todo? Ahora que nos toca
de cerca, nos hace pensar y mucho si realmente nuestros dirigentes y técnicos responsables
son tan competentes, como para, considerarnos del “primer mundo”… si es que hay
más de uno.
Acto
seguido y para separar fases vamos a tomar este tren, que nos llevó a
Grazalema, y ahora continuamos leyendo.
Salimos
desde el Puerto del Boyar, por el sendero que rumbo Sur, asciende al Puerto de
las Presillas, y
de aquí marchando hacia el SSE, llegamos a la casa del Dornajo.
La mañana desapacible, fría y con una visibilidad muy reducida, hacía que
precisáramos del impermeable para no mojarnos, pero a la vez, estuvo realmente
emocionante y placentera, pues casi no nos acordábamos en que dirección caían
las gotas de agua al llover.
Ascendiendo
por el Circo de Dornajo, se llega a Navazuelos, donde daremos con el sendero
que asciende al Simancón, rumbo Norte, y por aquí tuvimos que sacar el
paraguas, durante la elaboración de un té para calentarnos y tomar unos frutos
frescos y otros secos.
La subida está bien definida, pero realmente la
visibilidad podía provocar que alguien poco conocedor de la zona, se perdiese.
Desde
la cumbre, lloviendo, bajamos a Grazalema por los Llanos del Endrinal, y hubo
un momento en
que nos pareció que podría salir el astro rey, pero ascendiendo
al merendero del Boyar, nos cayó “la grande”… ¡que placer, caminar bajo la
lluvia!
Guapo, bonita zona para perderse y mojarse. Quizas algo rezbaladizo, no se? vosotros la conoceis mejor. Saludos.
ResponderEliminarNo creas, Salvador, se camina todo el tiempo por sendero, menos en el circo de Dornajo, pero la caliza es nueva, no está gastada, y no resbala, y lo mismo ocurre en el Simancón. Lo mejor de todo, fue que solo nos cruzamos 3 personas...
ResponderEliminarGracias.
Hola Fran, veo que hay otro montañero/kayakista por aquí.
ResponderEliminarYo la montaña/escalada la tengo algo apartada, porque tengo el mar a 5 minutos de mi casa, así que mientras no me canse del kayak ... ahí estamos :)
Gracias por el apunte en mi blog sobre configurar los comentarios, no tenía ni idea ... soy bloguero novato ;)
Ahora ya no hay que escribir cosas raras, o eso creo :)
Lo que tienes que configurar tú bien es el horario, pues esto lo estoy escribiendo a las 18:23 y ya ves las horas que aparecen.
ResponderEliminarA mí también me pasaba al principio que no encontraba eso para configurarlo.
Buscando se encuentra :)
Ya hemos arreglado el desfase horario, gracias por decirlo.
ResponderEliminarCierto es que la cabra tira al monte, pero como hay algo genético que nos conecta al mar, pues ahí andamos, subiendo y remando... hasta que me harte del kayak, que es lo más engorroso.
Un saludo.