Seguramente,
si viajamos a Picos de Europa desde Andalucía, pasaremos por Benavente, y por
lo tanto, veremos alguna indicación en la autovía del tipo: León – Benavente.
Pues de eso queremos hablar, de León Benavente… un grupo musical de Rock
independiente que inspiró su nombre en estas dos ciudades y en el tramo de
carretera que las une. Tienen, entre otras muchas y buenas canciones, una
versión de Europa Ha Muerto… de Ilegales… que viene a estar muy de moda.
El
techo de León es compartido con el Principado, y recae en una de las montañas
más bellas y con mayor prominencia de cuantas podamos ascender en la península.
Si
entre tus planes, y volvemos a hablar de eso, está el conquistar todos los
techos, al menos los Ibéricos, haz de saber la dificultad a la que te vas a
enfrentar.
Saliendo
desde las Invernales del Texu, donde se quedó el coche, ya que el carril es
malo para turismos, supone un desnivel de 2100 metros hacia arriba, con unas 13
horas de actividad, haciendo noche a la vuelta en Vega de Urriellu. Al día
siguiente solo hay que descender 1100m.
El
refugio, reserva plazas para los que lleguen sin reservar, pero cuidado con
esto… se ceden por orden de llegada. Para evitar sorpresas, cargamos sacos,
esterillas... Al pasar por Refugio de Urriellu, montamos el vivac y metimos
dentro todo lo que no pretendíamos usar durante la ascensión: material de
vivac, de cocina, forros… así viajaríamos más livianos en lo que nos restaba de
jornada. Habíamos ascendido casi 1000 metros, y nos quedaban otros tantos.
Preguntamos
al guarda por el camino hacia Torre Cerredo, y nos confirmó el rumbo,
advirtiendo de la trepada que tendríamos que superar en la Brecha de los
Cazadores, y allá que nos dirigimos con ansia viva.
Las
vistas del Naranjo de Bulnes mejoran por momentos, y empezamos a cruzarnos con
algunas montañeras (y montañeros) que habían hecho noche en Cabrones. Hay
collados de infarto por el Diente de Urriellu y la Horcada Arenera… en las
Torres Areneras había una cordada escalando. Ahora nos dirigimos hacia el Jou
de Cerredo, y la imponente vista de la cima más alta de todo Picos, nos hace
sentir una fuerte emoción. Hace calor… alguien nos advierte que tengamos
cuidado con el horario, pues ya es tarde… y es que hemos empezado a caminar
desde muy abajo, y el cansancio se va notando… en montaña, hay que escuchar al
cuerpo, y saber reservar fuerzas para la vuelta.
Desde
la base, se ve difícil la ascensión… imponente, con muchos pasos de neveros
colgantes y con demasiada exposición.
Algunos
bajan con cuerdas… y es fácil perder las referencias pues entramos en un
terreno muy escarpado… nos planteamos si seguir, o empezar a descender y dar
por zanjada la ascensión.
Los
bastones, hace un buen rato que ya no son de utilidad, y trepando libremente,
disfrutando de algunos pasos de III, pasando una chimenea con nieve empotrada,
saltando una peligrosa separación entre nieve y roca, aberronchado al rocaje
vivo y mirando de vez en cuando al vacío para sentir que seguimos vivos… se va
avanzando hasta acariciar la cumbre… la ansiada cumbre… el Techo de Asturias y
León: Torre Cerredo.
Seguramente,
si no fuese posible disfrutar de ciertos momentos de soledad y contemplar las
mejores vistas que una actividad te pueda proporcionar… no ascenderíamos
montañas. La sensación de ver el mar… muy lejos… ver la pequeña Ruta del Cares,
Torre Blanca (desde donde mirábamos con intriga las rocas en las que hoy nos
sentamos), el Tesorero… es muy difícil explicar las emociones que se viven en
esta preciada y emblemática cumbre caliza.
Ha
sido el tercer techo provincial conseguido en menos de una semana… estamos
cansados, hace calor… hay que comer… no hay agua por ninguna parte… es tarde,
aunque a nosotros no nos lo parece. Nos metemos nieve bajo el casco, para
mitigar el calor, nos quitamos las botas, para descansar los pies, y tras
recuperar fuerzas, comenzamos a bajar, antes de que se llegue a mascar la
tragedia. No hay sombra ninguna…
Tras
una larga y preciosa jornada, arribamos a la Vega de Urriellu, habiendo tenido
que usar cuerda para descender la Brecha de los Cazadores, y tras la cena,
repusimos el cuerpo, de esas 13 horas de montaña, vivaqueando bajo un cielo
espectacular, con luna llena, y con la suerte de tener durmiendo a 20 metros, a
uno de los mejores escaladores del planeta: Iker Pou.
La
bajada a Sotres, la realizaríamos al día siguiente.
Collado de Pandébano. |
Al fondo la Vega de Urriellu. |
Brecha de los Cazadores. |
Horcada Arenera. |
Torrecerredo. |
El Jou de Cerredo. |
Vistas desde Torrecerredo. |
Peña Prieta y Torre Blanca al fondo. |
Picu de Urriellu. |
Preparando el desayuno. |
Me alegro mucho... Nos vemos Buenas Madrugadas...
ResponderEliminarQue bien os lo habéis montado en este ultimo viaje y sinceramente, que me alegro. (Aunque por dentro me come un poco esa envidia sana...jeje). Nos vemos.
EliminarMuchas gracias Salva. Espero que este año podamos hacer juntos alguna de esas ascensiones que tanto nos gustan... como aquel Cerro de los Machos...
EliminarLa verdad es que hemos aprovechado el viaje... se ha hecho un poco de todo: ciudad, cultura, costa, montaña... al salir de casa, ya teníamos las intenciones claras, pues llevaba en la mochila los papeles con las cumbres que pretendíamos ascender, y la meteo acompañó... fíjate que desde Torre Cerredo, se veía el mar. Fue una ascensión espectacular, aunque hay pasos comprometidos arriba, y el desnivel es bastante alto... pero lo conseguimos... nosotros vamos muy lentos, pero casi siempre, por no decir siempre, llegamos a cima. No hay prisa.
Un abrazo.
Que bueno Fran...Ayer estuve a punto de colgar mi ascenso y al final lo hice hoy, vaya coincidencias...Me alegro un montón de vuestro reto y ascenso.Enhorabuena, Salud y montaña.Sl2 pareja.
ResponderEliminarLa verdad es que estamos sincronizados... esto apunta a que nos veamos pronto, de nuevo.
EliminarUna pena, por otro lado, lo del desgraciado accidente ocurrido esta semana en Torrecerredo. Es una montaña que exige mucha concentración y precaución, sobre todo a la bajada.
Un abrazo para ti, y espero que sigas disfrutando. Gracias.