Simancón Invernal

Vivimos en la gaditana Sierra de Grazalema una de las más copiosas nevadas de los últimos años.

Dejamos el coche el sábado 21, en el Puerto del Boyar, aparcado sobre el hielo. El nacimiento del Guadalete estaba cubierto por un grueso manto níveo… el collado de las Presillas, los Llanos del Endrinal, la subida al Simancón… todo era paz, frío, tranquilidad, y conversación con muchos de los montañeros que nos íbamos encontrando por el camino, casi todos sevillanos.

Bajamos del Pocillo Verde por la cañada de la Berejuela, y decidimos descender hasta Grazalema… todo había sido disfrute, sensaciones placenteras, rica gastronomía extremeña, té calentito y reconfortante… hasta las inmediaciones de la “capital serrana” … desde donde emergía un gran griterío constante, pitos de vehículos… y demás sonidos no autóctonos de estos enclaves.

Lori Meyers, los granadinos, sacan disco el mes que viene… ya tenemos a nuestra disposición el tema Evolución, como un adelanto a su gran trabajo. La verdad está dicha en alguna de las frases que componen esta gran canción… “hemos tomado el camino de la destrucción”.

El nieto de la señora que tiene los animales a los pies de Peñón Chico, estaba indignado. Le habían dejado abierta la cancela la tarde del viernes, y el burro pasó toda la noche en el aparcamiento del camping Tajo Rodillo; las vacas… nos preguntó por ellas, y le dijimos donde estaban: más allá de la cañada de la Berejuela… huyendo del griterío. La parcela llena de latas, el camino lleno de plásticos… el aparcamiento parecía un botellón… el camino de subida al Puerto del Boyar, el de los Charcones, era una marea humana tirando de todo al suelo, pisando la zona repoblada que queda detrás del sendero (habían abierto la cancelita y allí campaban destruyendo toda clase de vegetación con tal de hacerse una foto con una bola de nieve en las manos).

Las repoblaciones son importantes, y se llevan a cabo con el dinero de todos… después nos quejamos en las redes sociales.

De pronto, alguien bajaba a gran velocidad derrapando a lomos de su bolsa de plástico… y tenías que esquivarlo si no querías que te rompiese los tobillos…

Y parafraseando de nuevo a Lori Meyers: Todo esto es culpa de la gente…