Aún no ha amanecido y el día viene con algo de niebla. Cruzamos la frontera hispano-portuguesa por el salto de Saucelle, camino de Bruçó, la pequeña y encantadora población del país vecino, inmersa en el Parque Natural do Douro Internacional. Hemos tardado en llegar, debido a la espesa humedad que lo cierra todo. Dejamos nuestro coche a la entrada de la población y vamos a seguir las indicaciones de la propuesta que nos traemos entre manos.
Hace frío… comenzamos por caminos perfectamente ciclables… hay bastantes posibilidades para conocer el entorno a lomos del tándem, de hecho.
Muros de piedra seca, históricos, y enormes berrocales graníticos, acompañados de una agradable vegetación a cargo de robles, algún pino, escobones… pasto… incluso olivos, y la espesura que reina en el ambiente, promete disiparse antes de arribar a los enormes acantilados que el paso del Duero ha configurado por este rincón incomparable.
La presa de Aldeadávila nos sobrecoge, y en la otra orilla, el país vecino nos ofrece unos acantilados realmente difíciles de gestionar.
Desde aquí las vistas son enormes, y eso que no se trata de un recorrido ascendente.
Nada hacía imaginar aquel 28 de diciembre, que íbamos a despedir el año y comenzar el recién estrenado 2019, con un concierto en directo de Pedro Abrunhosa Comité Caviar. Fue una grandísima sorpresa. Es una formación muy sólida, con 2 guitarras, bajo, teclados, coro femenino, batería y sección de viento. Tienen un sonido bastante limpio, y Pedro transmite mucho sentimiento con su tono grave de voz. Una banda portuguesa que no habíamos tenido la oportunidad de escuchar y que nos brindó cambiar de año a través de su trabajo, y hacerlo mientras sonaban los fuegos de artificio que se lanzaron en la Avenida Dos Aliados, tocando precisamente Vem Ter Comigo Aos Aliados, es una muestra de su calidad musical y emocional.
El entorno del concelho de Mogadouro merece una visita y una caminata, pues se trata de una comarca agradable y acogedora. Tanto a pie como en bicicleta, disfrutar de las orillas del Duero, o Douro, va a resultar muy gratificante. Son zonas muy poco pobladas en las cuales, la sensación de aislamiento y soledad, producen paz interior… al igual que la música que ofertamos hoy.
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| Se comienza en el casco urbano de Bruçó |
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| Camino pasa entre fincas delimitadas por muros de piedra |
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| El paisaje está salpicado con enormes berrocales. |
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| Llegada a los acantilados del río Duero |
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| En la otra orilla vemos las centrales hidroelécticas. |
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| Vistas de la impresionante presa. |
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| El acceso a la presa es a través de túneles. |
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| Antigua casa cuartel. |
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| Puente confeccionado con materiales naturales. |
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| Construcciones típicas de los pueblos portugueses. |
Impresionantes parajes del Duero, con lo modesto que es su nacimiento a pies de Urbión y luego...
ResponderEliminarUn saludo.
Saludos, Dani. Precisamente nos sorprendió una magnífica tormenta de granizo y rayos en el nacimiento. Nos refugiamos bajo la piedra Elefante. Preciosos los Picos de Urbión. Y es verdad, comparas el nacimiento con este cañón, y hay gran diferencia. Un par de días después, aterrizamos en Porto, donde desemboca... y eso si que es impresionante. ¡Cuanta vida y cuanta belleza oferta esa ciudad! Pasamos allí el final de año, de concierto... una pasada. 200.000 personas viendo el evento... y el día anterior la San Silvestre... se lo montan bien los vecinos... los tenemos muy cerca y tienen parajes muy bellos que visitar. Hace dos años estuvimos en la Serra da Estrela, y es muy recomendable. Es una extensión del Sistema Central...
EliminarMuchas gracias por participar, compañero.
... luego impresiona la cosa. He estado una sola vez por allí dos o tres días y me parecieron pocos, no dudo que vuelva pronto ya que me dejo un gran recuerdo. Saludos.
EliminarIsa, Fran os lo montáis de escándalo, a la Sierra de la Estrella me invito Ana a ir y tuve que haber aceptado y este año la Laguna Negra y Picos de Urbion se me quedo a escasos kilómetros u horas, un viaje este ultimo mio para no repetir. Insisto pronto deberíamos quedar. Saludos.
ResponderEliminarSaludos, Salva. La Sierra de la Estrella es imprescindible de visitar. A parte de que hay buen paisanaje por aquella zona, y nos reciben muy bien, se come estupendamente, y aunque es una ascensión que se puede hacer en coche hasta la cima... tiene una caminata agradable y muy interesante, por unos acantilados altos, y con muy bonitas vistas. Si coincides con la sierra nevada, como nosotros, lo pasarás mejor, pues se forman chorreras bastante caudalosas.
ResponderEliminarEsta zona del Douro, no la conocía, y nos ha parecido impresionante. De allí a Guimarães se tarda poco, además, y luego, Porto está muy cerca. El camino desde Bruçó a Guimarães, tiene paisajes que invitan a estar por allí un mes.
Ya nos veremos, digo yo.
Espero que si, me refiero a lo de vernos... yo cuando estuve allí me escape a ver Panoias, Isa sabe de que hablo, otro altar rupestre, quizás el mas impresionante. Saludos, nos vemos.
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