viernes, 19 de julio de 2024

La Mira ( 2346m) desde el Alto de Durano (Km 6). PR-AV-18.

Y la intención era ascender desde la Plataforma, por el Puerto de Candeleda… mas el mapa muestra  un camino desde el Alto de Durano, pasando por el Puerto del Peón.

Lo dicho… y no eran las siete de la mañana cuando nos estábamos amarrando las Bestard. Hacía 4 años que no pisábamos Gredos en Julio… nos hemos aficionado a las virtudes del invierno… pero este 2024, DANA tras DANA se nos ha cortado el paso a estas montañas tan graníticas… y aquí estamos en plena canícula.

La aparición, de Menandro, es una obra de teatro clásico, una comedia, adaptada a tiempos modernos, que disfrutamos en el Teatro Romano de Mérida dos días antes de ponernos las botas. Los 39 grados de la emeritense, no impidieron que las carcajadas y una sonrisa permanente se instalaran en nuestros caldeados pulmones, y en todo el graderío, durante más de hora y media. Verbo Producciones, de la mano de Fernando Ramos (que es uno de los actores) y el grupo entero, hacen un trabajo realmente bueno. Hoy día es difícil encontrar actuaciones que te hagan reír sin recurrir al chiste fácil. Aquí, el humor y la cultura más exquisita van todo el tiempo de la mano… una adaptación realmente sorprendente. Uno de los personajes que más nos gustó, fue el coro: cuatro columnas griegas que están todo el tiempo presente en cada escena… supongo que es como una alegoría que muestra que las piedras están siempre ahí, como testigos mudos de la historia. Las columnas lo ven todo y lo acompañan… con voces, palmas, coreografía… de verdad… algo muy recomendable.

Y no eran las siete de la mañana, como dijimos… cruzamos una cancela que por un camino ciclable nos permite ir acercándonos al corral de la Covacha, recomendable de conocer esta parte de historia. Por aquí vamos buscando el río Barbellido, uno de los afluentes del Tormes, bastante caudaloso, y que nace por esta garganta por la cual caminamos.

Ya cuando la cosa se ponía tiesa, empezamos a ver algún roquero solitario… hacía tiempo que no veíamos uno; algún colirrojo tizón, y por supuesto, alguna rapaz que volaba lejos… irreconocible. Nos vamos metiendo de lleno en las proximidades del Puerto del Peón, donde el ecosistema cambia de manera radical para dar paso a los verdaderos roquedos de piedras caballeras de la divisoria más importante de este sistema montañoso, que es la que separa las vertientes del Tormes y el Tiétar.

Según reseñas, esta ruta, hasta el puerto del Peón, es considerada de dificultad física alta. Nosotros no hicimos el puerto del Peón, si no que continuamos hasta la Mira, que es como meter el doble de distancia, aunque desde aquí, ya parece fácil llegar a la Mira… pero no equivocaros… además, luego hay que volver y el calor “apreta”.

Esta arista, con risco Perico al alcance, donde me meto de un salto a buscar el primer geo de la mañana, es realmente agradecida de caminar… además, de la Vera, a parte de pimentón, llega aire fresco… por fin un alivio térmico. Tomamos café en el puerto del Peón, sentados en una mesa de cuarzo, feldespato y mica, y rodeados de escobas. Salimos hacia la Mira, que ya se divisa al fondo del fondo del tó. Isabel pregunta: ¿Esa es la Mira?... y le digo: No… ¡aquella del fondo es la Mira! 

Un saltamontes viajero se me posa en la visera de la pamela, delante de mis ojos… y recorre casi toda la arista de polizón, y a la sombra. No hay que molestar a la fauna.

El próximo objetivo es el refugio Los Pelaos… en ruina absoluta, pero antes tenemos un descenso inmenso, acompañado de un posterior ascenso… casi hubiera sido mejor crestear… esto nos pasa por seguir un camino.

Frente a esas ruinas, hay una fuente de agua cristalina y fría… importante dato, ya que es julio, y nos permite repostar agua… esta es la diferencia con los sistemas kársticos, en los cuales no hay nada de agua durante la canícula… ni en todo el estío… y aquí hablamos de una fuente que mana a 2200m de altitud. ¡Todo un lujo! Pero siguiendo el juego del geocaching, me retiro del camino mientras Isabel continúa, y bajo a las pozas de los Pelaos… un sitio realmente increíble, que si no es por el maldito geocaching, no lo hubiera conocido. Un recipiente de 2016 que lleva 6 años sin registrarse… y está impoluto. Para que veamos lo duradero que es el plástico.

¿Creo que he escuchado una chova piquirroja? Y algún buitre leonado a lo lejos agita el mundo con sus enormes alas… dominando la mitad de Cáceres. Menudas vistas hay desde aquí… aunque el calor provocaba cierta reverberación. 

No se estaba nada mal en ese espectacular torreón de sillares graníticos donde se ubica el V.G. de la Mira… nos hubiésemos quedado allí a comer, pero el sol te tuesta… el puto sol, parafraseando a los Ciclonautas.

Bajamos por el refugio de los Pelaos… rellenamos agua, y a deshacer el camino… pero vimos hitos que salían a la izquierda… la izquierda siempre es mejor plan, y saqué el plano. Hay una desdibujada vereda que baja muy directa hacia el río Barbellido y esquiva toda la gran vuelta del puerto del Peón… pues no se diga más… no creo que tenga pérdida. Y nos perdimos.

Llegó un momento en que el hambre apretaba tanto o más que el sol, incluso que el propio sentido común. Encontramos un lugar donde comer a la sombra, con el culo apoyado en material mullido, y con los pies metidos en agua. Si lo llegamos a pedir, no nos lo conceden. Para colmo de males, un buitre negro (Aegypius monachus) vuela por nuestros momentáneos dominios para nosotros solos. Ver a la mayor de las rapaces de Europa no es una suerte que se viva a diario, incluso caminando por estos parajes.

La bajada fue relativamente sencilla y notablemente más corta, y aunque el camino ya no es un PR, hay suficiente huella y está jalonado con hitos. Acertamos con la decisión. Fueron poco más de 9 horas de actividad hasta arribar al alto de Durano.




 

lunes, 13 de mayo de 2024

Salvemos al Chorlitejo Patinegro

Y bien, ¿Qué es esto de Salvemos al Chorlitejo Patinegro?, ¿Porqué se va a tratar este tema en un blog de montaña?. Porque es necesario que se conozca este proyecto.

La primera vez que escuchamos hablar del chorlitejo patinegro fue en 2019, cuando El Bosque Habitado dedicó algún programa a darlo a conocer, ya que se había declarado Ave del Año por SEO/Birdlife. Al año siguiente, con las intensas restricciones de movilidad y reunión, se empezó en Cádiz este proyecto de protección y conservación de la mano de Agadén (Asociación Gaditana para la Defensa y Estudio de la Naturaleza); pero antes hay que comentar que ya por la zona de Tarifa existía un proyecto de la mano de Salva Solís y otras personas; incluso llegaron a salir en Tierra y Mar, un programa de Canal Sur TV. 

Comencemos poniendo en contexto:

Vanesa Rivera, presidenta de Agadén Ecologistas en Acción, recibió un día una llamada de una joven sevillana, por whatsapp, indicando que se había encontrado un pollo… y se lo había llevado para Sevilla. Vanesa le explicó que no podía hacer eso, ya que los chorlitejos patinegros (al ver la foto que le mandó supo lo que era) son nidífugos, y que tanto el macho como la hembra están siempre al cuidado, pero que ellos campean solos… que tenía que devolverlo al sitio donde lo cogió o moriría… ya era tarde, ese pollo murió, con toda probabilidad y seguridad; Vanessa se reunió con Paula Marchena, y se dieron cuenta de algo vital para esta especie:  el desconocimiento también los mata; hay personas sensibles, que no saben nada de la biología del ave, y creen que están ayudando con la acción de recogerlo… sin saber que lo que hacen es provocarle la muerte al animal. Como todo en esta vida, el estudio es algo muy importante. Hay que leer, informarse, tener curiosidad… y no dejarse llevar por lo que nos pueda ofrecer, por ejemplo este blog, o el primer video que veamos en youtube o instagram. Hay que contrastar siempre. Investiga sobre el chorlitejo patinegro y saca tus conclusiones. Y por supuesto, refuta en comentarios si no estás de acuerdo con lo que aquí exponemos.

En 2020, estando por la playa, como siempre recogiendo plásticos, vi a dos personas con prismáticos por la Punta del Boquerón… y me acerqué a hablar. Eran Guillermo Gutiérrez y Blas Ramírez. Estaban haciendo el trabajo de censo del chorlitejo patinegro, para este proyecto que acababa de nacer. Yo no tenía ni idea de aves… me sacabas del buitre leonado y la chova piquirroja, y me perdía. Pero eso me gustó. No me metí en el voluntariado en ese momento, pero al cabo de unos meses, nos volvimos a encontrar, y ahí establecimos contacto y me dispuse a colaborar.

El proyecto se centraba en las playas, ya que es el lugar donde esta especie, reproductora en nuestras costas, tiene el mayor problema de supervivencia. ¿Porqué? Es fácil de entender: la época de reproducción de esta especie limícola, coincide con la llegada masiva del turismo a las playas.

¿Qué tienen estas playas que tanto le gusta a nuestro querido chorlitejo? Vida. Esa sería la palabra que lo engloba todo. Pero hay que seguir ampliando: Arenales pedregosos, dunas, vegetación dunar, refugio natural, alimento… pero les falla la tranquilidad. Un ave, para subsistir, necesita básicamente dos cosas: alimento, y que lo dejen tranquilo. Si el alimento falla (pesticidas, contaminación,…) y no encuentran una zona donde poder procrear sin molestias (turismo masivo, pérdida de hábitats, pruebas deportivas multitudinarias, limpiezas de playa en época de cría, etc.), esa especie irá desapareciendo poco a poco. Es mejor dejar la posible basura plástica entre las dunas, que no les va a molestar, y proceder a limpiar la zona cuando pase la época de cría... si queremos contribuir a que no desaparezca este ave.

En el caso de nuestro protagonista, se ha visto década a década sin espacio para llevar a cabo su esfuerzo por no desaparecer. Zonas como Benidorm, o la Costa del Sol, han supuesto una pérdida total de esta especie. Pero no todo está perdido, y aunque sea difícil de entender, tenemos que dejar de ser egoístas y pensar que no estamos solos en el planeta. Como se suele decir: lo llaman progreso y no lo es... no se puede edificar todo.

Otro de los mayores problemas de subsistencia de este ave, son las limpiezas mecánicas de playas. Esa acción destroza completamente su hábitat, además de aplastar literalmente los nidos… lo hemos visto, por desgracia. Afortunadamente se está consiguiendo que algunos ayuntamientos no lleven a cabo estas acciones en zonas próximas al cordón dunar, y por supuesto, que no se despedregue la playa. Esto ha sido trabajo de Agadén, que se ha reunido con los ayuntamientos que han querido y sabido escuchar.

Más problema: los perros sueltos en la playa. La mayoría de personas que tienen perro, son totalmente ignorantes del daño que producen sus mascotas domésticas en un medio natural. Recordemos que el perro, no es un animal que forme parte de ese ecosistema. Los perros, por normativa, deben ir atados. No hay excusas. 

¿Dónde nidifica el chorlitejo patinegro? Es un ave limícola, por lo tanto nidifica en zonas de playa o próxima a fangos donde poder alimentarse. Los huevos los deposita en el suelo, en un pequeño cuenco que el macho practica en la arena moviendo sus alas y patas. Normalmente rodeado de piedras, conchas, o a veces bajo el refugio de alguna planta que le proporcione seguridad y mimetismo. La única defensa que estas aves tienen ante sus depredadores naturales, es el mimetizaje… pero claro… ese mimetizaje se vuelve en su contra cuando tratamos con el ser humano. No los vemos, y los aplastamos, literalmente. 

Ni hablar de actividades como las excursiones en quad o vehículos a motor de cualquier índole atravesando playas y cordones dunares. Esto es una barbaridad, no sólo para el chorlitejo patinegro.

Protección:

En algunas playas (cada vez en más playas), se están instalando mallas cinegéticas en las zonas de cría, para que transeúntes y mascotas no puedan entrar a molestar a la fauna, con cartelería muy bien elaborada, para explicar y sensibilizar. No me cansaré de repetir la buena labor que está llevando a cabo Agadén, y de manera totalmente altruista. Dado que la época de cría abarca desde abril hasta agosto, debemos respetar escrupulosamente estas protecciones, pero no siempre lo conseguimos. 

Nuestra labor en este proyecto es (a parte de hacer censos, con material óptico y sin molestar en absoluto), la de informar a los usuarios de playa de la problemática que tiene este pequeño y atractivo ave para subsistir, y cómo poder ayudarlo. Lógicamente, no siempre obtenemos respuestas agradables… y no podemos hacer nada; imagina las respuestas que te dan cuando le dices que hay un ave en peligro de extinción que cría en esta zona y no debemos pasar: “ahí no hay ningún ave”; “yo soy amante de los animales”; “esos no están en peligro de extinción, porque se ven miles”… y es verdad… vemos cientos, o miles de limícolas… pero las personas que no son observadoras, confunden (y doy fe) el chorlitejo patinegro (Anarhynchus alexandrinus), con el correlimos tridáctilo (Calidris alba), el correlimos común (Calidris alpina), el chorlitejo grande (Charadrius hiatícula), el charrancito común (Sternula albifrons), o el vuelvepiedras común (Arenaria interpres).

De todos esos cientos de limícolas… apenas 40 individuos son chorlitejos patinegros… y más de la mitad de las parejas reproductoras pierden sus pollos en los primeros días de eclosión, por acciones humanas.

Fuera de playas, la Bahía de Cádiz ofrece mucha superficie de marismas potencialmente idónea para que el pequeño chorlitejo pueda criar… pero, en estos últimos años, y por necesidad de esparcimiento de la población se han habilitado caminos, incluido un nefasto Eurovelo8, en los antiguos esteros de San Fernando, por ejemplo. ¿Qué ocurre en estos senderos públicos? Que el personal no respeta la normativa municipal, suelta a los perros, y estos matan a las crías de chorlitejo patinegro. Si respetásemos la normativa y no nos saliésemos del camino, ellos podrían reproducirse sin problemas. Necesitan de nuestra colaboración, porque es nuestra culpa el hecho de que estén desapareciendo. No hay que buscar otros culpables.

En dos semanas, en mi zona de control más exhaustivo, han muerto siete pollos, de ocho eclosiones. Las cifras no pueden ir a peor… tenemos que revertir esta tendencia entre todas, y conseguir que el Chorlitejo patinegro sea un símbolo de nuestra Bahía, de nuestra ciudad (San Fernando) y de todo el litoral gaditano.

Practica nuestro eslogan, y "Únete al bando"; el chorlitejo patinegro te necesita.


Láminas extraídas del cuaderno del chorlitejo patinegro creado por Agadén.

Se explican muchos detalles del ave y del proyecto.



La recogida de residuos se debe hacer fuera de la época de cría.

Recogida simbólica de colillas para concienciar sobre el proyecto y el problema.

Pollo de chorlitejo patinegro escondido. Nos fuimos inmediatamente del lugar.

A los 20 minutos, volvimos, y el pollo ya se había ido. Se quedan inmóviles para camuflarse.

Macho adulto. Fotografía de José Antonio Gutierrez. Puerto Real.

Hembra adulta. Fotografía de José Antonio Gutierrez. Puerto Real.

¿Cuantas patas puede tener una hembra? Fotografía de Blas Ramirez. San Fernando.

Con los alumnos del IES Huerta del Rosario. Chiclana. Fotografía de Guillermo Gutierrez.

jueves, 9 de mayo de 2024

Sierra de las Nieves (La Peñilla) y Sierra de Grazalema (El Torreón).

Despedimos abril con la entrada de un potente frente frío que auguraba momentos inolvidables en la montaña… de hecho, estuvo nevando por el Sistema Central, Sierra Nevada… y las temperaturas se desplomaron, literalmente.

Era, además, el mundial de motociclismo en el Circuito de Jerez… y para ir a las sierras… hay que pasar por la puerta… menudo atasco se forma… pero no había prisa ninguna… la idea era la de caminar hasta donde alcanzase la luz. Hace décadas que no me interesan las motos en absoluto… creo que forma parte de mi evolución.

Toda la zona del área recreativa de Quejigales está a tope de floración. Tiramos milla por aquellos pinsapares, que se lucían de verde intenso y olores potentes, hasta alcanzar la Meseta de Quejigales en total y absoluta soledad. Sólo vimos arriba a una pareja que nos preguntó en el aparcamiento por el camino de subida al Torrecilla. Y ovejas… vimos muchas ovejas… y pájaros… escuchamos muchísimos pájaros… algún día desarrollaremos la habilidad de reconocerlos por su canto… seguro… de hecho, ya reconocemos algunos.

La tarde cayó, y bajó el termómetro. Arribamos a la Peñilla, y los juegos de luces y nubes eran tan brillantes, que vimos con absoluta certeza unas collalbas grises, collalbas rubias, acentores alpinos, chovas piquirrojas, cernícalo vulgar, buitre leonado… y seguramente alguna más, imposible de identificar. Llovió un poco… ¡menuda sensación más placentera! Las grises nubes, la soledad, el suave y gélido viento… las gigantescas cortinas de lluvia que se oteaban a lo lejos, hacia Málaga… el delicado sonido de las collalbas… el chillido de las Phyrrocorax… estaba la montaña como jamás la habríamos soñado.

Y cayó la noche… a 1700 metros de altitud… menos mal que íbamos preparados… por la mañana, 0,8 grados es lo que marcaba el reloj dentro de la tienda; el techo estaba congelado. La collalba rubia seguía nuestros movimientos matinales… visible sin prismático, parecía una bolita blanca y amarilla, vigilante.

Por no llevar el Primus Easy, de latiguillo, tuvimos que abrigar con las manos el cartucho de gas, para que evaporase bien y poder calentar un café. El Coleman Outlander micro no es lo suyo para temperaturas tan bajas… pero se pudo desayunar con paciencia… o quizá es que estemos acostumbrados a los infernillos de latiguillo y precalentador, y si usas el pequeñito y básico, se queda corto. Nos gusta tomar aceite virgen extra por la mañana, y eso hoy día no es inconveniente, y no hablamos de monodosis de usar y tirar… hay que ser sostenibles.

La caminata de bajada, fue de lo más placentero que hemos hecho en los últimos meses. No nos cruzamos a nadie. En el área recreativa había dos coches.

Pasamos por Ronda, entramos a comprar algo de comida, y nos fuimos para Grazalema, directamente… bajando el Boyar, aparcamos en el comienzo del camino de ascensión al Torreón… que estaba repleto de coches… y a las 13:30 estábamos subiendo al pico más alto de la provincia más meridional de la península ibérica.

A las 15:25 estábamos en la cumbre, y de nuevo se desplomó la temperatura… jersey, impermeable… todo… comimos arriba del todo con unas vistas increíbles… y tras comprobar que ya no hay libro de firmas, ni geocaché… hice otra panorámica para la página de Horizontes Ibéricos, que ha quedado bestial.

Así que, amanecemos y desayunamos en un Parque Nacional, y comemos en un Parque Natural… de Sierra de las Nieves, en un salto, a Sierra de Grazalema… ha sido una manera de intentar emular a nuestro amigo Dani, de San Fernando… sólo que él subió al Torrecilla y al Torreón en el mismo día… eso si que tiene mérito.

De vuelta a casa, el CD de Robben Ford en directo, volvió a dar algunas vueltas; pero una banda que me atrevo a recomendar, actual, es Miedo al Monstruo. Hacen una música interesante, pues son gente con una buena trayectoria musical… es un rap potente, de guitarras y base rítmica contundente con bajo y batería… nada de cajas de ritmo. De momento tienen dos canciones: La Jaula y Oh No… a cual mejor. Dale un tiento… el cantante, Julio Cordero (Julius Lamb en redes) es un tío muy interesante de escuchar, no solo cantando, si no dialogando… estuve 3 horas con un podcast de una entrevista que le hicieron en Radio El Palmar… y he escuchado dos veces la entrevista. Hay cosas, que merecen la pena repetir…  además, Julio es de San Fernando… es vecino, y hay que apoyar su música.






Dos vetustos amigos.








La caseta de vigilancia del Puerto de los Pilones.

La cumbre más elevada de la provincia que habitamos.

La mejor provincia de España a nivel ornitológico.

La sensación victoriosa es indescriptible.

No subestimes nunca la verticalidad del Torreón.