El
otoño ha comenzado hace apenas unos días, el equinoccio se ha hecho notable y
hay que madrugar para aprovechar las horas de luz.
Las
predicciones eran de lluvia al 100% de probabilidad, y así fue, pero ya
habíamos planeado esta salida con Javi, para que no coincidiese con los turnos
de trabajo, y como nos gusta variar las sensaciones, no dudamos un ápice y
mantuvimos firme el horario de nuestra cita.
Pensamos
que cuando se practica algo se hace por sentir una emoción, no por auto
imposición o por el mero hecho de aparentar o cualquier otra respuesta. Si
alguna actividad ya no te aportase energía o te resultase monótona, podrías
caer en la tentación de abandonarla…
La
llegada a la orilla del embalse se convirtió en una auténtica jornada de
trabajo que nadie esperaba, y cuando nos sentamos en nuestras piraguas (aquí
vamos sentados), casi empezamos a relajarnos, más que a activarnos.
El
viento del Sur, arreciaba por momentos, convirtiendo el avance en una tarea
dificultosa. Rodeados de agua, foresta y montañas, como La Silla, que debe su
nombre al parecido en su arista cimera con una silla de montar, fuimos
acercándonos a un islote que se sitúa en el centro del embalse.
Rodeando
dicha isla comenzó a llover torrencialmente, en la zona de barlovento, y la
sensación que sentimos todos fue muy placentera… ver como las gotas borbotean
en la superficie del agua azotada por el viento mientras remas tranquilamente
junto a la orilla bajo los eucaliptos, que te sirven de techo… no tiene nombre…
igual que escuchar el blues pantanoso, eléctrico y clásico de Sherman
Robertson.
Tras
una grata comida en aquella frondosa porción de tierra rodeada de agua,
disfrutando de la mesa de aluminio porteada por Javi y Xema en las bodegas de
sus Finisterre y Shark, respectivamente y de la cerveza fría (que aprovechados
son esos tambuchos), nos echamos de nuevo al agua, y Miguel y Alejandro
estuvieron probando las sensaciones de otros kayaks distintos a los suyos… es
lo bueno de estas reuniones de amigos.
Poco
antes de llegar de vuelta al lugar donde comenzamos nuestra singladura, la
naturaleza nos obsequió con un chaparrón brutal en el que todos empezamos a
disparar fotos mientras disfrutábamos de aquel incomparable momento.
Foto del móvil de Miguel Angel Cabeza de Vaca |
Foto gentileza de Miguel Angel Cabeza de Vaca |
Vehículo remolcado por Miguel Angel Cabeza de Vaca |
Os dejo el vídeo de este día, el montaje ha sido realizado por Alejandro (SENKABI)
http://vimeo.com/80382147
http://vimeo.com/80382147