Un
recorrido muy habitual, del que se suele hacer el miércoles de cada semana, en
solitario para entrenar un poco las piernas y algunas habilidades, pero que hoy
lo hemos hecho en petit comité y
dando forma circular para investigar un poco por algún carril no conocido.
El
día anterior había estado lloviendo (por fin) hasta bien entrada la noche, y la
mañana amaneció muy fría, pero aun así, la cantidad de ciclistas que nos hemos
cruzado, ha sido buena.
Primero
hemos tomado el carril que une San Fernando con Puerto Real, por las marismas
de la Bahía que discurre paralelo a la vía férrea, desviando nuestro rumbo por
el puente que cruza hacia la Barriada Meadero de la Reina, (llamado así desde
1862, cuando la reina Isabel II en su viaje para conocer las provincias del sur, asistió a un despesque
de estero que son típicos en la zona y le entraron sus ganas fisiológicas por
lo que se retiró, como cualquier persona aunque en este caso real, detrás de
unos arbustos a satisfacer sus necesidades y un fiel fijón que la vio denominó
al lugar con este topónimo), y por aquí, tomamos el corredor Verde Dos Bahías,
hasta la cantera de El Berrueco, pasando junto a la quesería Los Hardales, y
conectando con la carretera que une Chiclana con Medina Sidonia.
Hubo
que cruzar el arroyo del Zurraque, con bastante barro, y el arroyo de las
Salinetas, que casi nunca presenta problemas. El primero, dentro de unos
cuantos días más de lluvia, ya se hará impracticable, como todos los años, y
habrá que dejar esta cañada en barbecho hasta bien entrada la primavera… pero
Puerto Real, tiene una buena red de caminos ciclables para entrenar casi todo
el año.
Al
alcanzar la carretera de Medina, ya había algún miembro del pelotón, que
acumulaba cansancio demás, por lo tanto, tras un bucle de reconocimiento
carrilero que nos dejó en el mismo punto… paramos a avituallarnos en
condiciones.
Tras
unos kilómetros de carretera, llegamos a Chiclana, a Venta Agustín, y ahí
tomamos el trazado del nuevo tranvía que dentro de unos años (o eso dicen) unirá
esta población con Cádiz… por ahora sirve para que nosotros circulemos en bici.
Arribamos a La Isla, cruzando el Puente Suazo, lleno de pescadores a diestro y
siniestro… y hablando de Siniestro… Total, recordemos Miña Terra Gallega,
ingeniosa versión del Sweet Home Alabama de Lynyrd Skynyrd, en la que se
describe la morriña que se siente cuando se tiene uno que ir lejos de casa… con
lo bonito que es regresar a ella pedaleando.